Vivo en Texas y acabo de comprar 16 hectáreas de naturaleza virgen en Oklahoma. Es un terreno precioso en medio de la nada, así que solo se oyen los sonidos de la naturaleza y la única luz es la del espectacular cielo campestre. Este ha sido un sueño de toda la vida que por fin se ha hecho realidad. Me encanta estar al aire libre en contacto con la naturaleza y disfruto acampar, hacer bushcraft y, por supuesto, disparar.
Quería el equipo de caza perfecto: ligero y maniobrable. Como tirador de larga distancia, me encantan los rifles de cerrojo, así que, como era de esperar, busqué uno ligero. Me decidí por el Sig Cross con cañón de 16" en calibre 6.5 Creedmoor y lente térmica Sightmark Wraith Mini . También monté un punto rojo Sightmark Mini Shot M-Spec M1 a 45 grados como opción de respaldo/diurna.
Después de cinco horas de viaje, llegué a mi hermoso refugio para una cacería nocturna de dos días. Era el momento perfecto para probar el Wraith Mini Thermal. Llegamos justo antes del anochecer, así que preparé el rifle en el trípode, encendí una fogata para iluminar nuestra zona de acampada y preparé la cena antes de salir a cazar toda la noche.
Nuestra cacería comenzó con un acecho de dos horas por la propiedad. Caminamos lentamente y nos detuvimos unos minutos, escuchando cualquier sonido de jabalíes y usando el Wraith Mini Thermal para observar a nuestro alrededor y detectar cualquier señal de actividad. Nuestro acecho de dos horas se convirtió en unas tres horas y media de caminata, viendo solo zarigüeyas y mapaches. Decidimos regresar al campamento cerca de los comederos y pasar el resto de la noche en nuestro escondite. Después de unos 45 minutos, oímos el crujido de las hojas al caminar. ¿Eran estos los jabalíes que habíamos estado esperando? En silencio, tomamos nuestros rifles y miramos hacia el ruido. Solo un armadillo.
La Sightmark Wraith Mini Thermal fue absolutamente increíble para captar señales de calor. Fue fácil localizar a todos los animalitos, y me sorprendió aún más que captara insectos. Pude ver algunos insectos volando y arrastrándose por los árboles. En este punto, decidimos que no tendríamos una cacería de jabalíes exitosa, pero pasaríamos unas horas más en el escondite jugando con las funciones y ajustes de la térmica. Descubrí que los ajustes de blanco incandescente y negro incandescente eran los que más me gustaban. El negro incandescente era más agradable a la vista y mostraba más detalles al localizar un animal. El blanco incandescente hacía que cualquier señal de calor del animal fuera inconfundible. Usé el blanco incandescente la mayor parte del tiempo cuando estaba en el escondite y el negro incandescente cuando caminaba para no distorsionar tanto mi visión. Me encanta la retícula mil que ofrece la mira porque estoy muy familiarizado con ellas por el tiro a larga distancia. Lo único que me preocupaba era quedarme sin batería, así que opté por la batería Mini QD que se engancha a un riel Picatinny. Después de una noche entera de caza, solo había usado un cuarto de la batería. La combinación de rifle y mira telescópica funcionó a la perfección.
La segunda noche la pasamos principalmente relajándonos junto a la fogata. Caminamos un poco, a ver si veíamos algún cerdo, pero después de una hora, volvimos al campamento y nos sentamos alrededor de la fogata, mirando de vez en cuando la línea de tiro a unos 125 metros de los comederos. De nuevo, no había cerdos, solo ratones y mapaches. Acabamos disparando a todos los ratones que salían al descubierto, así que la noche terminó con una explosión. Literalmente.
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